«Aprende del Girasol, que siempre se vuelve hacia el Sol, aún con el cielo cubierto de nubes»

-Anónimo

Amanda aparentemente logro superar su sueño frustrado era obvio el Circo con o sin ella seguiría por el mundo dando sus funciones… Ahora empezaba su nueva etapa estudiantil, iba al mismo lugar donde hizo la primaria, todo era igual, lo único que cambiaba es que ya no se les podía llamar Profesores, ahora se les debía llamar Licenciados, iba al Colegio a cursar el Ciclo Básico, el tiempo pasaba entre su casita dominguera, el colegio, los cuadernos, escuchar música, mirar telenovelas, jugar con sus hermanos, y por las tardes le encantaba ir a la floristería, seguía siendo aquella niña inquieta, curiosa, se daba cuenta de todo, por eso su Mamá Lala siempre que salía le recomendaba el negocio cosa que Amanda lo hacía con gusto ya que todas las tardes pasaba el heladero a la misma hora y por el mismo lugar, nunca fue una buena estudiante, las únicas dos materias que le gustaban era la Historia y la Geografía, le encantaba tomar los libros que habían en la Biblioteca y se tiraba en el piso de la sala de su casa a estar leyéndolos y miraba muy meticulosamente las imágenes, fotos con hermosos paisajes que le transportaban aquel lugar y con voz llena de melancolía decía …. Todos estos países hubiera conocido si Carolina no le hubiera avisado a Mamá Lala, los cerraba con rabia a veces con lágrimas, sentimientos encontrados  y se levantaba, pues pronto daría su programa favorito el Chavo del Ocho, Amanda a esas alturas tenía una vasta experiencia en ventas, le era más fácil vender flores que ir al Colegio, y aquella profesora de la primaria, de vez en cuando iba al negocio de sus padres, claro ya no le daba ninguna queja, pero resulta que por cosas de la vida justo pasaba por ahí y Mamá Lala siempre muy agradecida por la visita de la muy querida Profesora le daba su ramito de rosas, para Amanda no le era fácil seguir el mismo estereotipo de sus hermanos mayores, cuando ella entro al Ciclo Básico su hermano Carlitos ya se destacaba en el deporte era de la selección de fútbol y también era el Abanderado del Pabellón de Quito y no se diga Carolina con un año de diferencia ya pertenecía al Consejo Estudiantil,  y cuando la Licenciada le decía Amanda porque no eres como tus hermanos?, pues ella muy risueña les contestaba ….. Fíjese bien en esta mano, todos somos hijos de la misma Madre y Padre, con mucha más razón pertenecemos a la misma mano, pero los hijos somos como los dedos, muy distintos los unos de los otros, y Yo, Licenciada soy la hija del dedo del medio, ya se podrán imaginar la cara que puso la Licenciada, la reportó a la inspectoría, Amanda le explicaba al Inspector que no había sido ningún acto de irrespeto, pero ella al ser la tercera hija obvio era la hija del dedo del medio, ya no iban al negocio a avisarle a su Mamá, ahora llamaban por teléfono a darle las quejas, cuando su Papá Cucu contestaba la llamada es obvio nada pasaría pues Amanda siempre fue la hija mimada, consentida, la niña preferida de su  Papá , pero si  Mamá Lala contestaba el teléfono y decía …. Florería la Orquídea a la orden…, entonces  la suerte ese día no estaba del lado de la hija del dedo del medio… Amanda desde niña fue distinta a todos sus hermanos, creció en el mismo jardín de flores, pero opto por ser como el Girasol, feliz, sencilla, brillante, sin espinas, y de gran corazón….